miércoles, 18 de febrero de 2009

Despertar


Esta mañana desperté y el mundo no parecía nacer.
Esta mañana me he visto, sin necesidad de un espejo, y la realidad me ha ido desgarrando.
Debía comprenderlo, entender la sustancia de lo que soy, a fin de cuentas.
Me gusta la música absurda.
Cuento leyendas muertas de personajes que no conocerán la felicidad.
Ilustro rostros tristes envueltos en niebla oscura.
Lloro en silencio comprendiendo que quizá todo es mentira.
Y pienso tan sólo un poco, en que existe alegría allá fuera.
Pero eso es sólo un exhalar, nada más que un suspiro.
Pienso una vez más, porque aquello que he sido significa que quizá no era mentira.

Tal vez ahora todo sea real, ya que estoy despertando en una marisma, la que me rodeó desde el momento de mi muerte, hace tanto…